¿Qué hemos aprendido?

A lo largo de está entrada me tendré que explicar con precisión, porque es un tema complicado. Hoy voy a hablar de la ley de Memoria Histórica a la vez que escucho algunas cancioncillas de Beyoncé, que esta semana me viene genial.

Ya sabéis que amo el funcionamiento de la Historia, el presente investiga sobre el pasado y a la vez deja una marca para que el futuro le pueda invetigar a él. Pero claro, si destruímos o alteramos demasiado esa marca rompemos ese funcionamiento. Y eso es justo lo que hace esta ley. No voy a meterme demasiado en política, porque acabo de levantarme después de una siesta muy merecida y no tengo las ideas muy claras. Pero es que duele ver como en mi país, que se supone que está bastante desarrollado, aún no han llegado a la idea de dejar las cosas como están, porque, aunque una estatua, un título haya sido para alguien más o menos bueno, es Historia.

Por ejemplo, si los catalanes hubieran borrado todo rastro de la derrota del 11 de Septiembre (nada que ver con las Torres Gemelas) ante Felipe V ahora no tendríamos Diada de Catalunya. La Historia es lo bueno y lo malo.

L'Onze de Septembre de 1714 (El Once de Septiembre de 1714), por Antoni Estruch

De verdad, no conocí la dictadura, así que demasiado no puedo opinar (solamente sobre lo que sé a través de mis abuelos, mis padres...), pero sé que no se pueden retirar esos monumentos de las calles así porque sí. Porque, aunque no me crean, puede llegar el momento en que la humanidad no sepa quien fue ese hombre que, para mejor o peor, forma parte de la historia de España.

Se deberían preocupar más de cuidar al presente y dejar el pasado tal y como está, que no molesta demasiado.

PD: A ver, no estoy totalmente en contra de la Ley de Memória Histórica. Solamente de la parte que la altera. Saber sobre lo que pasó no es malo, al revés.

Ciencia y ética

Ciencia y ética. Dos términos que, muy a mi pesar, están siempre relacionados. El título de esta entrada también podría ser "Ciencia, ética y religión", pero creo que necesito tener más práctica en esto de los blogs para hablar de un tema tan delicado.

Hace una semana, más o menos, salió una noticia que me impactó de sobremanera. No recuerdo muy bien donde la leí, pero recuerdo perfectamente el titular. "Podrás escojer a tu hijo mediante celulas madre embrionarias": cuando yo pienso en los hijos que tendré, pienso en lo que quiero que sean: sanos, fuertes y buenas personas (suena a tópico pero es la pura verdad). Me da lo mismo que mi hijo sea rubio, con ojos azules, verdes o rojos. Solamente quiero que no sufra y que no haga sufrir. Pero intentar manipular la genética, nuestra huella más duradera en este mundo, es algo horrible.

Pero, mi querido señor Obama (me encanta :P), ha quitado la estúpida ley impuesta por Bush que no dejaba manipular dichas celulas. Aquí hay un punto de contradicción, diréis vosotros. Pues no, no me contradigo: porque odio que se utilicen estas celulas, el posible gran avance de la ciencia, para cosas tan triviales como las ya nombradas. Pero usarlas para acabar enfermedades, para salvar a personas, ¡eso es lo más bonito que hay en el mundo! Y lo antinatural sería no luchar por esas personas.

Yo pienso que no se deberían mezclar dos ramas tan distintas como la ética (que para cada uno significa algo distinto, por tanto es un término abstracto) y la ciencia, que ante todo debe seguir avanzando, pero que de momento está siendo estancada por algunas frases antinaturales que han dicho algunas personas con mucho poder.

Esta entrada me recuerda que debo hablar más de Ciencia y más de Obama.

Orgullo y muchos, muchos prejuicios

Ala, me cansé de no hablar de cosas chungas y polémicas. Bueno, no son chungas pero sí polémicas. Para los que no lo sepan, soy de Cataluña, una región de España en la que una parte de su población, una minoría, quiere ser independiente del resto del país. Yo no me encuentro entre ellos, pero los entiendo. Porque hay una generalización hacia los catalanes que me pone de los nervios, y no todos somos iguales. Ni todos los madrileños son unos chulos, ni todos los andaluces unos vagos. Son famas que tenemos cada comunidad, y por las que estamos siendo juzgados a diario, pero como que solamente conozco mi caso, os lo voy a contar.

En mi país hay un gran porcentaje de gente, entre los que no me encuentro, que se siente muy, muy orgullosa de ser española. Hasta ahí nada malo, pero también hay otro porcentaje de gente que no entiende (y no respeta) a los que no son así. Yo no me siento demasiado orgullosa de ser española, pero me encanta vivir aquí. En Cataluña hay bastante gente (pero no toda, que hay de todo como en todos lados), entre los que no me incluyo, que tampoco respetan a los españoles orgullosos y se meten con todo quisqui que represente al país. Si se respetaran, no pasaría nada. Pero como no lo hacen, sacan el hacha y empieza la guerra.

La guerra y los prejuicios. Cataluña es España, pero esta última también es mucho más grande, con mucha más gente. Mucha gente, que solamente ha escuchado los hachazos de los orgullosos hacia los revolucionarios, piensa que todos los de aquí somos unos locos que queremos separarnos de su amada España. Pues no. Y a partir de ahí todo tipo de adjetivos no aptos para todos los públicos. Y al revés, estos catalanes de los que hablaba antes (y la gente que les hace caso), piensan que todos los españoles son escoria que no pueden vivir sin ellos. Qué complicado es todo.

A ver, en mi DNI pone España, así que soy española. Lo que se sienta por dentro, es otra cosa. Y cuando en mi carné ponga Cataluña (cosa que espero que no pase, la verdad) pues seré catalana, y me conformaré con ello. Si quieres algo, lucha por ello. Pero no te metas con los que no se quieren meter, no tengas prejuicios contra esa gente. Y sobretodo, hay que jugar limpio.

Yo conozco a gente que se siente muy bien siendo española, gente que no le gusta nada pero que lo acata, y gente insoportable que solamente le gusta tocar las narices con su opinión, y no respetan las de los demás. Pero bueno, habrá que vivir con ello. Y si piensas que estoy loca, te lo concedo.

Ángeles

Primera novedad, una canción muy especial:





Pride And Prejudice's Soundtrack - Another Dance

Lo prometido es deuda, supongo que a poca gente le gustarán entradas de este tipo, pero necesito contaros mi amor hacia los ángeles.
No soy muy religiosa, pero es que no creo que tenga nada que ver. Me gusta leer mucho, eso ya lo sabéis, y hay un género realmente genial: el que habla de ángeles y demonios (el libro con ese nombre es ESPECTACULAR :P, pero bueno...al grano). Las historias y leyendas que rodean a estas criaturas son emocionantes, y mi imaginación da para muuucho. Cuando vaya a Florencia, que voy a ir, seguramente estaré a poquitos metros de este cuadro.

La anunciación, Sandro Botticelli

Una preciosa ilustración del Renacimiento, en la que muestra al arcángel San Gabriel como una mujer. Que preciosidad sería, pero seamos realistas. Gabriel está en la Biblia, y la Biblia, debido a la época en la que está escrita, tiene comentarios MUY machistas. Ya me he ganado unos cuantos tomatazos, pero es cierto.

Los ángeles son, como ya he dicho, celestiales. Pero yo soy más de irme por los malos de la película. Los ángeles caídos, los ángeles rebeldes. Lucifer y sus súbditos. La maldad personificada, ¿son en realidad así? ¿o solamente han sido injustamente calificados de malvados por ir contra Dios? No me importa demasiado, pero el arte les hace mucha justicia de nuevo (lo llevo en la sangre, amo los buenos libros, las buenas pinturas y las buenas esculturas).

¿Los ángeles (caídos o no) existen? No lo sé, ni nadie lo sabrá. Pero qué criaturas tan bellas, tan amantes y tan enemigas de nuestra naturaleza, pero que nos protegen al fin y al cabo. Y para acabar, qué criaturas tan bonitas, yo querría sus alas, fueran de fuego o de nubes.

Si sabéis de algún libro bueno de este tema, ya sabéis, sed buenos y compartir el título al menos :P

Máquina del tiempo

Historia. Sí, historia sin s ni nada que se refiera al término "narración" , me refiero a nuestra historia. La que estudiamos y la mayoría se duermen, la que cuenta todo nuestro pasado y gracias a la que podemos adivinar ciertas cosas del futuro. La historia es una de mis pasiones, una que amo con todo mi ser.

Nuestra historia refleja tantas cosas que no sería capaz de nombrarlas aquí. Muestra que el hombre (en término general, me refiero al hombre como humano, no solo al género masculo) no sabe aprender de los errores del pasado, y no sabe avanzar en algunas cosas tan simples como la paz o el diálogo (supongo que porque van unidas con la ambición y el egoísmo), pero por otra parte ha avanzado y aprendido tanto de si mismo que resulta apasionante.

A veces me gustaría tener una máquina del tiempo. Si la tuviera, lo primero que haría es ir a la Antigua Grecia (y secuestrar a Héctor de Troya, aunque fuera un personaje :P), probablemente comprobaría que Jesús existió y aprendería todo lo que pudiera de los romanos. Cabe decir que sí, me gustaría verlo pero no vivir allí :P. La edad Media probablemente me la saltaría, porque aunque me emociona mucho conocer el pasado de mi tierra (para los más desorientados, durante esa época los catalanes llegaron hasta Atenas y Neopatria, pero también eran los europeos más sanguinarios xD), fue una época cruel para el ser humano. Seguramente sí podría vivir en el siglo XVIII y XIX, la época de las señoritas, los bailes...que sí, no es que fuera la época más favorecedora para la mujer, pero...yo quiero un Señor Darcy (así que me iría a la Inglaterra de esa época, sobre la que más he leído).

PD: Siento cambiar tanto de diseño, pero es que no me quedaba conforme con ninguno. Este es muy bonito, y es el que más me ha costado montar, así que seguramente durará más.
PD2: Quiero escribir sobre ángeles (los buenos, los caídos y los rebeldes), a ver si me da tiempo hoy, o si no mañana.

Volver al inicio Volver arriba Careciendo de vida. Theme ligneous by pure-essence.net. Bloggerized by Chica Blogger.